Cómo elaborar su plan de acción en materia de autocuidado

El autocuidado es un término cada vez más usual, pero ¿qué significa en realidad? Solemos asociar el autocuidado con actividades relacionadas a los spas o el yoga. Si bien se refiere a actividades benéficas para la salud, el autocuidado abarca mucho más: implica toda acción realizada para mejorar y mantener la salud física y mental propia. Es algo que debemos procurarnos a fin de optimizar nuestro bienestar general. 

Entre las agendas cargadas y el estrés de la vida cotidiana, es natural preguntarse si contamos realmente con tiempo para los cuidados personales. Por ello, debemos comprender que ahora, más que nunca, es importante integrar el autocuidado en la vida diaria. Al igual que ocurre con todo objetivo que deseamos alcanzar, establecer un plan es indispensable para empezar. 

Cuando elabore su plan, tenga en cuenta los 7 Pilares del Autocuidado definidos por la Fundación Internacional de Autocuidado (ISF, por sus siglas en inglés):

Conocimientos y competencias en materia de salud. Cuanto más sepa, mejores decisiones tomará. El sitio web de la Organización Mundial de la Salud es una excelente fuente de informaciones sobre varios temas relacionados con la salud, como los comportamientos adictivos, la seguridad alimentaria, la salud bucodental, las enfermedades de transmisión sexual, el tabaco y las vacunas. 

Bienestar mental, autoconciencia y autonomía. Tome pausas de manera regular en su jornada de trabajo, aunque sólo sea para levantarse 10 minutos y estirarse. Tome tiempo para sí mismo. Busque una actividad que le guste y prográmela en su calendario como haría con cualquier otra cita importante. La interacción social es vital para nuestro bienestar mental. Comuníquese regularmente con amigos y seres queridos.

Actividad física. Hacer 150 minutos de actividad cardiovascular moderada por semana puede parecer intimidante. Pero si encuentra una actividad que le guste, como caminar, bailar o andar en bicicleta- le ayudará a pasar el tiempo con mayor facilidad. Sus tareas cotidianas, como cortar el césped, también pueden contar dentro de su plan de actividad física. Si ha sido sedentario durante un tiempo, empiece poco a poco e intente incorporar alguna actividad a su plan cotidiano de autocuidado y aumente la intensidad progresivamente. Aunque el objetivo de largo plazo sea de 150 minutos semanales, trate de comenzar con algo que le parezca realizable, tal vez 30 minutos por semana.

Alimentación sana. Procure llevar una alimentación equilibrada, rica en fruta, verdura y cereales integrales. Evite las grasas saturadas, las grasas trans, el colesterol, la sal y los azúcares añadidos. Empiece por reunirse con su médico o nutricionista para hablar de sus necesidades dietéticas y elaborar un plan de alimentación saludable. 

Prevención y atenuación de riesgos. Someterse de manera regular a los exámenes médicos recomendados por su médico puede ayudarle a prevenir enfermedades. Manténgase informado sobre los factores de riesgo de enfermedades como las cardiopatías y el cáncer, de modo que pueda tomar medidas para atenuar esos riesgos. Parte de su plan de autocuidado debe incluir exámenes regulares, tales como los análisis de sangre y revisiones dentales y oftalmológicas, al igual que medidas de prevención de accidentes, como el uso de protección solar y la conducción segura.

Buena higiene. Con toda probabilidad habrá oído hablar mucho sobre la higiene: lavarse bien las manos, taparse la boca al toser o estornudar y limpiar correctamente las superficies. Una buena higiene también se refiere al baño, el cuidado dental y la seguridad alimentaria. Todas estas medidas forman parte de un plan de autocuidado riguroso.

Utilización racional y responsable de los productos y servicios de cuidado personal. Un tratamiento en un spa o una sesión de yoga pueden ser un buen complemento de su plan de autocuidado, pero por desgracia estas opciones no siempre son posibles o abordables. Los cuidados personales también pueden incluir cosas más elementales, como el hecho de asegurarse de que los medicamentos recetados se utilizan según lo prescrito. Otros productos y servicios que pueden formar parte de su plan son las sesiones virtuales de fitness, la toma de vitaminas y suplementos alimenticios, y la utilización de herramientas de diagnóstico en casa, como el tensiómetro. Asegúrese de que los productos y servicios cumplen las normas de calidad y seguridad y son adecuados para sus necesidades. En caso de duda, consulte a su médico.

Autorícese a tomar tiempo para usted y empiece hoy mismo su plan de acción de autocuidado.