Si un familiar o amigo suyo tiene problemas de drogas o alcohol, es importante conocer los signos indicadores de trastornos por consumo de sustancias (TCS). También debe entender cómo abordar la cuestión y conocer los recursos de los que disponen su allegado, usted y toda otra persona que se vea afectada por el problema.
El trastorno por consumo de sustancias puede ser un problema grave. El hecho de consumir drogas ilícitas o hacer uso indebido de medicamentos recetados, alcohol o cannabis puede derivar en un deterioro grave de la persona y provocarle dependencia a la sustancia psicoactiva. Esta dependencia, a su vez, dificulta la abstinencia. Por suerte, gracias a los apoyos adecuados es posible limitar las consecuencias perjudiciales de los TCS, como son los problemas de salud y el menoscabo en las relaciones interpersonales.
Consecuencias de los trastornos por consumo de sustancias
...sobre la persona que presenta el comportamiento dañino
El consumo imprudente de drogas y alcohol puede causar graves problemas, incluidos importantes problemas de salud. El alcoholismo no tratado expone a enfermedades como la cirrosis hepática, las enfermedades cardiacas, daños cerebrales y puede provocar cáncer. El consumo indebido de fármacos (o un consumo distinto al recetado) puede provocar problemas respiratorios, deficiencia en el sistema inmunológico, mayor sobrecarga del hígado, afecciones cardiacas, convulsiones, apoplejía, daño a los tejidos cerebrales, problemas con la memoria y la capacidad de tomar decisiones, muerte por sobredosis y otros problemas relacionados con los fármacos que se consumen.
A ello pueden sumarse
...sore los demás
También los familiares y amigos de quienes presentan trastornos por consumo de sustancias pueden verse afectados. El estrés de vivir con alguien que hace uso problemático de drogas o alcohol o de cuidar de tales personas puede provocar
Los efectos de los trastornos por consumo de sustancias de un allegado pueden ser drásticos. Los cambios de humor y las crisis que se producen afectan a quienes le quieren –cónyuge o pareja, hijos o amigos– porque de pronto ven que sus propias vidas se vuelven ingobernables y adquieren formas de afrontamiento poco recomendables para tratar el problema relacionado con el alcohol o las drogas.
Los sentimientos del cónyuge, pareja o el allegado de alguien con TSC pueden oscilar entre la esperanza y la decepción. Pueden experimentar temor, confusión, ira, ansiedad y pérdida de autoestima, de manera creciente, en particular si ha habido numerosas recaídas. A medida que el problema progresa, la pareja o el familiar puede tener dificultades para saber cómo apoyar a su ser querido sin que ello suponga a un refuerzo inadvertido del consumo de sustancias. Por ejemplo, el padre de un hijo adulto con TCS que está en paro y vive en casa puede no estar seguro de si el hecho de subrogar sus gastos lo ayuda o lo perjudica. El término “codependiente” se utiliza a veces para describir lo que ocurre cuando los seres queridos establecen una interdependencia malsana. Por ejemplo, un cónyuge puede llamar al jefe de su pareja para decir que está enfermo, cuando en realidad lo que tiene es resaca.
En lo que respecta al consumo de sustancias de un progenitor, los niños pueden sentir vergüenza, inseguridad y tensión. A la postre, estos sentimientos se convierten en aislamiento social, impotencia y depresión. Cuando el consumo de sustancias de un progenitor persiste, puede que la familia empiece a vivir de crisis en crisis, lo cual afecta el desarrollo de los niños.
Los signos indicadores
No siempre es fácil entender los signos indicadores de un consumo dañino de alcohol o drogas porque las personas dependientes de sustancias hacen todo lo posible por ocultar su problema. El uso problemático del alcohol o las drogas afecta
Las personas que hacen un uso problemático de alcohol o drogas tienden a
Otro signo indicador común del TCS es que la familia, los amigos o el empleador de estas personas expresen su inquietud en torno a su problema de alcohol o drogas. Uno solo de estos indicadores implica que esa persona necesita ayuda profesional.
Opciones de tratamiento
El tipo de tratamiento coherente para alguien que presenta trastornos por consumo de sustancias depende de varios factores, tales como la frecuencia y la clase de sustancia o sustancias psicoactivas que esté consumiendo, la gravedad del problema y lo asequible del tratamiento en función de su situación. Por lo general se requiere ayuda profesional cuando el consumo de sustancias de una persona se ha convertido en un TCS.
El tratamiento suele comenzar con una valoración o evaluación formal para determinar el alcance del problema y el nivel de atención más indicado. Un profesional capacitado realizará una evaluación presencial, ya sea en el marco de un programa de tratamiento o en otro ámbito profesional. Al término de la valoración, el examinador deriva al paciente a un programa de tratamiento adecuado.
Diversos tipos de ayuda están disponibles.
Obtener ayuda para las personas que se enfrentan a trastornos por consumo de sustancias
Si bien algunas personas que presentan trastornos por consumo de sustancias conocen su problemática y saben que necesitan ayuda, a otras se les dificulta reconocer sus problemas y admitir la gravedad de su situación. Una serie de métodos –a veces llamados intervenciones– ayudan a familiares y amigos de alguien afectado por problemas relacionados con drogas o alcohol a plantear sus preocupaciones. Esos métodos consisten en conversaciones individuales entre el interesado y un asesor familiar de confianza, reuniones familiares organizadas con la ayuda de expertos, así como intervenciones formales más estructuradas.
Obtener ayuda para usted y los miembros de su familia
Si alguien a quien quiere consume drogas o alcohol de forma dañina, sepa que existen muchos apoyos y recursos, entre los cuales cuentan:
Su proveedor de atención primaria. Su proveedor de atención primaria puede remitirle a un clínico que trabaje con los allegados a personas que padecen trastornos relacionados al consumo de sustancias psicoactivas. También pueden informarle sobre los recursos útiles en su zona, como programas comunitarios de tratamiento, organismos de ayuda o grupos de apoyo.
Grupos de autoayuda para familiares y amigos de personas con trastornos por consumo de sustancias. Puede que le convenga echar un vistazo a los grupos de familia de Al-Anon, Nar-Anon o Smart Recovery, que son programas de autoayuda para los allegados a personas que tienen problemas de dependencia al alcohol o las drogas.
El programa de ayuda al empleado de su empresa. Si cuenta con este tipo de programas acuda a ellos para obtener apoyo y recursos.
El consumo compulsivo de alcohol o drogas es un problema grave y potencialmente mortal. Muchas personas que presentan trastornos por consumo de sustancias se recuperan y logran llevar una vida sana y gratificante sin requerir el uso de drogas o alcohol. Usted puede ayudar a su familiar o amigo a buscar ayuda profesional y, si usted tiene dificultades para hacer frente al comportamiento de su allegado, obtenga ayuda para usted también.